El jugador del Sevilla FC, Thomas Delaney, pasó 22 años en Copenhague y vuelve a su tierra natal ahora para medirse en Champions al conjunto local en un estadio, el Parken, que le es familiar. En esta temporada aspira a tener mayor protagonismo en el equipo
Thomas Delaney regresa a su tierra natal, a Dinamarca, y a la ciudad en la que nació, Copenhague, para medirse al club del que es aficionado desde niño. "Es increíble. He estado muchas veces en el Parken con la selección y con el Copenhague, pero es un poco raro regresar con otra camiseta. No la danesa, no la blanca del Copenhague, pero estoy deseando que llegue el día. Es un club que significa muchísimo para mí. Pasé 22 años allí. He nacido en la ciudad. Es parte de mí. Creo que habrá un gran ambiente, con un estadio lleno y muy ruidoso", ha comentado en una entrevista concedida a los medios oficiales del Sevilla FC.
El centrocampista danés aún no ha terminado que alcanzar el nivel de juego que de él se espera y confía en lograrlo en la presente temporada: "Pienso que puedo mejorar, el equipo también puede hacerlo. Para mí es un año muy importante porque quiero convertirme en un mejor jugador, en un jugador más decisivo".
En su proceso de adaptación, tal vez le haya costado más adaptarse a la cultura de nuestro país porque no domina el español. Las diferencias con su idioma natal son importantes: "No domino las lenguas romances, ni español, francés o italiano. El salto de Dinamarca a Alemania fue mucho más sencillo por el idioma. Tengo que estudiar más en las clases, aunque voy avanzando lentamente. La vida, por otra parte, aquí es muy buena. Tiene buen clima, aunque el calor a veces es un poco excesivo, pero en general es muy agradable".
También se ha referido a la crisis de juego y resultados que está atravesando el Sevilla. El triunfo ante el Espanyol en LaLiga ha dado una vida extra a Lopetegui y ha devuelto un poco de confianza, pero los tres puntos se ganaron con muchísimo sacrificio y el equipo sigue transmitiendo mucha fragilidad defensiva.
Para Delaney, "ha sido difícil. Hemos tenido mala suerte y tampoco hemos rendido lo suficiente. Ahora nos centramos sólo en el próximo partido para dar el paso decisivo que permita darle la vuelta a esta situación. Trabajamos duro día a día para mejorar. Somos honestos con nosotros mismos y sabemos que esto no es suficiente. No hemos rendido y necesitamos la ayuda de la afición. Son una gran parte de este club. Me rompe el corazón no poder ofrecerles lo que merecen".
Respecto a su compatriota, el también danés Dolberg, Delaney asegura que "se siente bien por no ser el único jugador danés del equipo, claro. Pienso que Kasper es un gran jugador al que todos conocemos. Le he visto jugar sobre todo en la selección y es un delantero que decide partidos. Y creo que un club como el Sevilla siempre busca jugadores de su perfil, que sean decisivos. Le doy la bienvenida y seguro que lo hará muy bien aquí con nosotros".