Los ingleses detectaron la debilidad de los sevillistas y encontraron en los contraataques la forma de desarbolar la zaga rival. Un duro correctivo para los de Nervión antes de afrontar el estreno liguero y que enfatiza en lo que debe invertir antes del cierre del mercado.
El Sevilla FC ponía fin a su pretemporada en Anfield. Los hispalenses viajaron hasta Inglaterra para medirse al Liverpool FC. Dos equipos con aspiraciones bien diferentes este año pero que estrenan nuevo entrenador. García Pimienta busca encauzar el rumbo de un club que lleva varias temporadas navegando lejos de sus objetivos. Por su parte, Arne Slot afronta la ardua tarea de sustituir a Jürgen Klopp, el entrenador más importante de los reds en el siglo XXI.
Para los de Nervión era el último amistoso antes del arranque liguero ante la UD Las Palmas. Tras tres victorias consecutivas los sevillistas buscaban demostrar que la idea del técnico catalán empieza a calar ante un rival que también suma el mismo número de triunfos seguidos. Mientras que el Liverpool FC afrontará esta tarde otro amistoso, casualmente contra la UD Las Palmas, y con el que sí dará por finalizada su preparación.
Al Sevilla FC poco le importó el escenario en el que estaba y presentó la misma presión alta que en otros días. Una propuesta que los ingleses también pusieron en práctica pero los sevillanos solventaron en los primeros compases con una buena salida de balón. El fallo llegó en el otro área. Idumbo se encontró con la ocasión más clara del partido tras un fallo de Quansah en el control que dejó al belga sólo contra Alisson. Cuando lo tenía todo de cara para marcar mandó el balón muy por encima de la portería.
A partir de esta ocasión el Liverpool FC empezó a adueñarse de la posesión y aumentando el ritmo, obligando a los de Nervión a dar un paso atrás en el campo. Salah fue quien más exigió a la defensa sevillista y siempre que recibía creaba una ocasión de peligro. Aunque Pedrosa no llegó a verse superado en ningún momento, el egipcio se las ingeniaba para tener más de una oportunidad para adelantar a los suyos con su característico tiro al palo largo desde la derecha.
A pesar de ello, el gol red nació de una jugada a balón parado. Los de Slot tuvieron una falta lateral que rechazó la zaga del Sevilla FC a la frontal y el balón le acabó llegando a Alexander-Arnold. El inglés sacó un pase alto medido a Diogo Jota que de primeras enganchó una volea a la escuadra derecha. Estar por detrás hizo que los hispalenses tomasen más riesgos y el Liverpool FC no los desaprovechó. Los contraataques se convirtieron en el mejor arma de los locales que agrandaron la distancia antes del descanso.
Nianzou no ganó un duelo aéreo ante Jota dejando espacio para correr. El portugués vio solo a Luis Díaz entrando por la izquierda y el colombiano puso una marcha más para superar a Nyland con un potente disparo nuevamente a la escuadra izquierda. En una jugada similar llegó el tercero justo cuando se había cumplido el minuto 45. Esta vez Salah fue quien se impuso al central francés y descargó a Mac Allister que filtró un pase a Szoboszlai. El hungaro no pecó de avaricia y le cedió el balón a Luis Díaz para que anotase su doblete a puerta vacía.
García Pimienta sólo mantuvo a Nyland, Ramón Martínez y Saúl de los que iniciaron el encuentro tras salir del descanso. El Liverpool no levantó el pie del acelerador tras el paso por vestuarios y el Sevilla FC se atascó en más de una ocasión en la salida de balón. Ejuke fue quien aportó algo más de claridad en ataque. El nigeriano desbordó siempre que pudo, generando alguna ocasión que obligase a Alisson a intervenir. De sus botas nació el gol sevillista. Ejuke encaró a su marca y cedió a Peque para que desde dentro del área sacase un disparo con rosca al palo largo que superó al portero rival.
Poco le duró la ilusión a los de Nervión de una posible remontada. En la siguiente jugada llegó el cuarto tanto de los reds. La zaga hispalense no despejó bien un balón en el área y el rechace le cayó a Nyoni, recién entrado al campo, que de volea superó esta vez por bajo a Nyland. Slot siguió moviendo su banquillo y refrescando energía en los suyos para que pudieran mantener su plan de juego. Y es que el Liverpool no aminoró el ritmo en ningún momento sabiendo que era el día de presentación ante su gente en esta nueva etapa que se abre tras Klopp.
De esta forma cerró el Sevilla FC una pretemporada que ha compaginado momentos de muy buen fútbol con otros de dudas. Pero al igual que no se deben sacar conclusiones definitivas tras las victorias tampoco se debería hacerlo tras las derrotas. Más allá de las evidentes necesidades de que lleguen refuerzos para el centro de la zaga. Los hispalenses no se van a encontrar este escenario y con rivales de tal entidad esta temporada salvo en contadas ocasiones, más si cabe al no tener competición europea. Próxima parada Las Palmas, que ese sí que contará.