El Sevilla y la Supercopa de Europa, una relación de desamor

Bartolomé Franco Rodríguez hace 1 año 248
El Sevilla FC recibiendo la medalla de subcampeón en la Supercopa de Europa frente al Bayern Munich Foto: EFE

De las seis finales disputadas sólo ha conseguido ganar la primera.

El Sevilla FC ya se encuentra en Atenas donde se jugará la Supercopa de Europa de 2023. El rival es el Manchester City de Pep Guardiola y Haaland. Un equipo que la temporada pasada ganó el triplete pero tras perder la Community Shield se ha quedado sin opciones del sextete. A pesar de las bajas con las que llegan siguen siendo un rival temible. Los de Nervión deberán dejar todo para conseguir levantar un trofeo que llevan sin conseguir desde 2006.

La felicidad de la primera vez 

Para que exista un desamor antes tuvo que haber esa relación especial entre ambos. La llama se encendió en Mónaco. El Sevilla se enfrentaba al Barcelona de Ronaldinho. A pesar de la superioridad de nombres, los sevillistas firmaron el que para muchos es el mejor partido de su historia. 0-3 con goles de Renato, Kanouté y Maresca. La primera vez que levantaron ese trofeo, y la última.

El partido que no se debió haber jugado

Un año después y también en Mónaco se citaban sevillistas y milanistas, aunque con un ambiente muy diferente. El fallecimiento de Antonio Puerta fue un mazazo para jugadores y afición a los que poco les importaba jugar esa final. Los italianos se alinearon con la postura de aplazar el partido pero la UEFA hizo caso omiso a sus peticiones. 3-1 a favor del Milan en una final que siempre se recordará por la falta de sensibilidad del ente europeo más que por el fútbol.

A contrapié 

Con toda seguridad la menos disputada de todas. El Sevilla llegaba en plena reestructuración mientras que enfrente estaba el Real Madrid. Los blancos habían roto la maldición de la décima y tenían la moral por las nubes. Dos goles de Cristiano Ronaldo sentenciaron un partido en el que los de Emery mostraron una cara muy diferente a la que luego se vería durante la temporada.

La final del siglo

Barcelona y Sevilla se volvían a encontrar en una Supercopa de Europa. Esta vez la moneda se decantó del lado culé, pero no sin antes dejarnos un partido para el recuerdo. Los de Luis Enrique fueron ganando por 4-1 pero los goles de Reyes, Gameiro y Konoplyanka mandaron el partido a la prórroga. Ya en el tiempo extra Pedro, que estaba también viviendo su propia historia de desamor con el Barcelona, marcó el gol de la victoria. Más allá del título, esta final se quedará en la memoria como la mejor Supercopa de Europa hasta la fecha.

Tan cerca y a la vez tan lejos 

Noruega presenció una de las mayores decepciones de la historia de los hispalenses. El Sevilla ganaba 1-2 en el descuento y tenía un córner a su favor. Todo parecía de cara pero el Madrid recuperó y acabó marcando ante una defensa descolocada. Una vez más en la prórroga la balanza no se inclinó para el Sevilla, que acabó perdiendo con un gol de Carvajal y envuelto en la polémica del partido.

La noche más amarga de En-Nesyri

La  última Supercopa de Europa disputada por los de Nervión se anteponía casi como misión imposible. El Bayern Munich llegaba de ganar la Champions en modo apisonadora, pero el Sevilla tiró de casta para tener prácticamente en la lona a los bávaros. Con 1-1, En-Nesyri tuvo la oportunidad de dejar K.O a los alemanes pero falló el mano a mano frente a Neuer. Otra vez en la prórroga y al borde de los penaltis Javi Martinez rompió los sueños de una afición, que no pudo acompañar a los suyos debido a la pandemia.

 

Mencionados en la noticia

Supercopa Europa
Primera División