El centrocampista del Sevilla FC asegura que Mendilibar “tiene un mérito de la hostia” porque ha logrado revertir la situación del equipo: “Dos meses atrás, para mí, era mi peor temporada y, de repente, si ganamos la Europa League va a ser una campaña que todos vamos a recordar”.
Fernando Reges es uno de los líderes en el vestuario del Sevilla FC. Su veteranía y saber estar sobre el campo lo agradece un equipo que sufre cuando él no está. Fuera del terreno de juego también habla claro. En el Open Media Day celebrado con motivo de la final de la Europa League del próximo 31 de mayo en Budapest (SevillaFC-Roma), el brasileño se ha referido a la impresionante reacción del equipo desde la llegada de Mendilibar, quien, dice, “tiene un mérito de la hostia”.
“Yo para mí, si tú me preguntas dos tres meses atrás para mí era la peor temporada de mi carrera, ¿sabes? Porque estaba pasándolo muy mal, yo y todos mis compañeros. Un vestuario totalmente hundido y, de repente, puede ser una temporada espectacular. Si ganamos la Europa League va a ser una temporada que todos vamos a recordar. La situación ha cambiado totalmente. Jugadores que estaban totalmente hundidos, mal de confianza, muy complicado y difícil, no nos encontrábamos dentro del campo, no jugábamos bien y, de repente, con Mendilibar, todos estamos enchufados y haciendo las cosas bien. No encajamos tanto gol y yo creo que Mendilibar tiene un mérito de la hostia”, ha comentado, refiriéndose, además, a otros asuntos.
Mendilibar ha logrado que todos los jugadores eleven su nivel: “Nosotros sabíamos del equipo que teníamos, de la calidad que tenemos dentro de la plantilla. Pero las cosas no nos salían. Mirabas a uno y a otro, siempre con desconfianza, y con la llegada de Mendilibar las cosas cambiaron totalmente. Ahora estamos todos enchufados y todos concentrados. Yo miro a Suso, Lamela y parecen, no sé, jugadores de altísimo nivel. Que lo son, pero que dos meses atrás no estaban nada enchufados. Ni yo ni ninguno. Y ahora estamos todos bien”.
La continuidad de Mendilibar: “Yo creo que en este momento está haciendo las cosas muy bien. Cuando llegó aquí ninguno pensaba que iba a conseguir hacer lo que está haciendo. Entonces, yo creo que tenemos que darle mérito, yo no decido estas cosas, pero yo estoy muy contento con él y vamos a ver qué va a pasar en la próxima temporada”.
Todos con la mente en la final pese a la visita del Real Madrid: “Es un partido contra el Madrid, nosotros tenemos que entrar enchufados para que no pase cosas raras, para que no haya ninguna lesión. Pero la verdad, claro, no te puedo mentir que nosotros estamos pensando en la final. Es una final muy importante para todos nosotros”.
La expulsión y la sanción de Acuña, que se pierde la final: “Fue una expulsión muy rara. No sé debería sacar el balón más rápido, pero yo creo que el árbitro también podría gestionarlo de una manera distinta. Yo la verdad es que el partido contra la Juve estaba muy contento porque conseguimos estar en una final más, pero un poco triste por eso, porque sabemos que Acuña es un jugador importantísimo para para nosotros. Ya ha pasado, ya sabemos que no va a estar e intentaremos conquistarla. El que entre, que haga las cosas bien para intentar ganar el partido con el grupo que tenemos, porque la verdad es que estamos todos enchufados”.
Mensaje para la afición: "Yo sé que es muy complicado, la afición está ahí. Yo creo que los vuelos están complicados, las entradas… todo muy difícil, pero esperamos que todos intenten encontrar la manera de estar ahí junto con nosotros. La afición es la que más nos anima y que nos ayuda el día de partido. Contra la Juve yo estaba hablando con Alex Sandro, que es mi amigo, y él me estaba contando que ganar aquí era muy complicado porque la afición aprieta mucho y nos ayuda. Nos animan y en los momentos que estamos pasándolo mal, la afición está siempre apoyando. Entonces, esperamos que estén ahí mínimo, no sé, 15.000 personas, para que nos apoyen y después del partido estar todos celebrando juntos".
Su rendimiento en Nervión y su secreto para estar en la elite a su edad: “Mucho sacrificio, intentad dormir lo más pronto posible, comer bien, ¿sabes? Y no hacer cosas raras. Por eso intento estar física y mentalmente bien, para así poder ayudar a mis compañeros. Yo no esperaba tanto. Venía de Turquía con 32 años, la gente desconfiaba de mí y la verdad es que no esperaba estar en mi cuarta temporada jugando una final más de Europa League. Estoy muy contento con la gente, que me trata muy bien y espero que este partido sea algo para que la afición nos recuerde como un equipo que pasó por momentos difíciles, pero que nunca se rindió”.
Pape Gueye y sus tres expulsiones: “Yo creo que el campeonato francés es totalmente distinto del campeonato español. Allí el fútbol es mucho más físico y a veces las entradas los árbitros no las sancionan con amarillo o con roja, y aquí sí. Aquí, si tú vas un poquito más arriba la gente te saca la roja. Yo me quedo triste por él, porque es un chaval con mucha calidad. Todavía necesita aprender algunas cosas, pero yo creo que en poco tiempo va a estar ayudándonos otra vez”.