Juventus 1-1 Sevilla FC: cedió el empate con el tiempo cumplido, pero mantiene vivo el sueño

Joaquín Adorna hace 1 año 108
Youssef En-Nesyri logró el tanto de un Sevilla FC que pudo certificar en el Juventus Stadium el pase a la final de la Europa League. EFE

Un Sevilla FC sólido pudo certificar el pase en un primer tiempo espectacular, en el que marcó En-Nesyri, pero con el tiempo cumplido la Juve logró el empate a la salida de un córner con gol de Federico Gatti.

Hay semifinal y opciones para que el Sevilla FC logre el pase a su séptima final de la Europa League. El favoritismo de la Juve se diluyó en un primer tiempo espectacular del conjunto de Mendilibar, en el que pudo dejar finiquitado un cruce, sobre el papel, desigual. Perdonó el Sevilla y la Juve, que apenas inquietó a Bono, se encontró con un empate, ya con el tiempo cumplido en el descuento –dio hasta el 96’ y se jugaba el 97’- que deja abierta una eliminatoria que se va a decidir en el Ramón Sánchez-Pizjuán.

Pudo matar la eliminatoria el Sevilla en un primer tiempo extraordinario. Por virtudes propias y por el mal planteamiento de una Juventus que dejó todo el protagonismo al conjunto de Mendilibar. Salvo en algunas acciones en las que la Juve pudo romper con cierta comodidad la presión alta y logró correr con espacios, en el resto de los primeros cuarenta y cinco minutos mandó el Sevilla y golpeó con un gol de En-Nesyri en una magnífica contra que activó Óliver Torres. Tuvo ocasiones, incluso, para matar la eliminatoria con un 0-2 o un 0-3, porque tuvo oportunidades para lograrlo.

Ni siquiera la lesión de Ocampos, que tuvo que ser sustituido por Montiel por las molestias que arrastra en el aductor, frenó el ímpetu de un equipo liderado por el 'rejuvenecido' Ivan Rakitic. Ocampos fue el mejor, como otras tantas veces, el tiempo que estuvo sobre el terreno de juego. De hecho, suyas fueron las dos mejores ocasiones antes del gol, en dos cabezazos. Uno abajo y otro al centro de la portería a la salida de un córner. En ambos casos, evitó el tanto el meta Wojciech Szczęsny. También participó Ocampos en el 0-1, en el que asiste a En-Nesyri después de que Óliver Torres prolongara al primer toque un contragolpe de libro. En el gol, hizo Bryan Gil lo mejor en un primer tiempo gris en el que, como otras veces, no tomó la mejor decisión en momentos clave.

Antes de adelantarse en el marcador, Acuña probó en un disparo lejano y Ocampos se encontró un balón dentro del área pequeña, lo tocó y su remate se le marchó a la izquierda a de Szczęsny. Después del gol quedó noqueada la Juve, que sólo se había acercado en un par de ocasiones a Bono por mediación de Vlahovic, y en ambas acciones en fuera de juego. Ocampos y En-Nesyri en una contra, en fuera de juego, tuvieron el 0-2 para un Sevilla que se hizo grande. Dos llegadas con centros de Navas y Bryan Gil, y un remate de En-Nesyri en los instantes finales, cerraron un primer tiempo magnífico de un Sevilla competitivo y ordenado.

Dos cambios en la Juve

En la segunda mitad, Massimiliano Allegri buscó la reacción de su equipo con dos cambios: Chiesa entró por el joven Miretti y otro joven, Iling-Junior, ocupó la plaza de Kostić. Y mejoró la Juve, en especial por el desborde de Iling-Junior, que buscó a un Montiel con luces y sombras, y que probó a Bono en el 64’. Dominó el conjunto italiano hasta que se fue reencontrando el Sevilla, que inquietó por primera vez en la segunda mitad con un remate alto de Navas.

La dinámica no cambiaba y Allegri tiró de Pogba, que entró por un desdibujado Di María; mientras que Mendilibar refrescaba el centro del campo con la entrada de Papu Gómez (sustituyó a un buen Óliver Torres en el minuto 74). La mejor noticia es que no había noticias en las áreas. Se mantenía firme el Sevilla y se desesperaba la Juve, en la que veían amarilla Locatelli (en el minuto 77) y Chiesa (dos minutos más tarde). Bryan Gil, que dejó su puesto a Lamela en el 82’, también fue amonestado por desplazar el balón y perder tiempo; mientras que Rakitic vio la amarilla por una falta en la que no toca balón.

Mendilibar ha convertido al Sevilla en una roca, en un equipo sólido, que cedió un empate cuando ya estaba el tiempo cumplido. Un córner y tres cabezazos dentro del área. Los dos últimos, el de Pogba y el de Federico Gatti, que envió el balón a la red. Queda la rabia de un encuentro que iba para triunfo sevillista. Empate, sensación de que el conjunto de Mendilibar puede lograr su séptima final en la Europa League y una vuelta en Nervión con el sueño vivo.

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