Las claves de la llegada de Isco Alarcón al Sevilla FC

Juanma Roldán 118
Isco y Lopetegui, con España.

Existen varios motivos de peso para justificar el cambio de opinión de la cúpula nervionense respecto a la posibilidad de hacerse con los servicios del exmadridista, cuya llegada a principios del verano estaba descartada.

La realidad es que no: en el Sevilla FC no tenían intención alguna al comienzo del mercado de firmar a Isco Alarcón (30). La edad, su elevado salario, la dificultad de sacar jugadores del centro del campo, los beneficios de haber repatriado a los canteranos Luis Alberto o Jose Campaña... El runrún era constante y se frenaba desde la propia entidad nervionense. Pero, finalmente, el malagueño ha terminado firmando con los del Ramón Sánchez-Pizjuán. ¿Por qué?

Hay varias claves que explica el giro inesperado de los hechos y que exponemos a continuación: 

 

Petición expresa de Lopetegui. Huelga decir que el vasco es un profesional intenso. Es algo que se aprecia en la zona técnica, durante los partidos, pero que también se nota en los despachos. Con Monchi ha tenido varias discusiones por ello. El de San Fernando suele conceder algún deseo a sus entrenadores, es cierto, pero generalmente éstos les piden perfiles y él, tirando del trabajo de la secretaría técnica, les pone sobre la mesa los nombres. Y con Julen no es tan así, pues el exseleccionador se suele salir bastante con la suya: Óliver, Tecatito, Rafa Mir, Alex Telles... y, ahora, Isco.  La situación del mercado. Ya que se quedaba Lopetegui, tras algunas dudas, la idea de Monchi pasaba por una cláisica revolución, para airear el vestuario y darle un giro al proyecto. Sin embargo, el mercado apenas se mueve: LaLiga mantiene los controles en el gasto, los futbolistas se niegan a cambiar de equipos y el anhelado dinero de la Premier se está quedando en la propia Premier. O sea, que ni habiendo vendido a Diego Carlos y Jules Koundé, el director general deportivo puede gastar apenas. E Isco estaba libre, mientras que Luis Alberto, por quien la SS Lazio pide al menos 20 millones de euros, no.   El cambio de dibujo. Antes, había tres atrás que lo aguantaban todo, pero sin sus dos centrales estrella Lopetegui ha comenzado a jugar en verano con dos mediocentros más en paralelo y un jugador por delante. Un 10. Y ahí encaja como un guante Isco. El malagueño, no obstante, también puede actuar como interior (si está muy fino) y hasta de falso extremo izquierdo con tendencia interior, rol encomendado por Lopetegui a Óliver o Papu en distintos partidos, buscando más un juego posicional.  Las lesiones de Suso. Si bien es criticado por un sector importante de la afición blanquirroja, el gaditano es el futbolista distinto del Sevilla FC, el que suele sacar los partidos de la monotonía, el que suele unir el centro del campo con la delantera. El problema es que Suso, a quien también pidió Lopetegui, por cierto, apenas juega y el fútbol del equipo es superplano sin él. Ante el Cádiz CF, se vio un nuevo ejemplo. Aunque puedan actuar juntos cuando el ex del AC Milan esté en condiciones, Isco llega para hacer ese papel de Suso. Para darle, en definitiva, más alegría y variedad al ataque de un generalmente plano Sevilla FC.  El esfuerzo del futbolista. Físico y económico. Corre por las redes una comparativa en la que se aprecia claramente que el malagueño -esta vez, al menos- se ha "cuidado". Y el propio Isco se lo corroboró a Monchi a su llegada este domingo a Los Lebreros, cuando el isleño le saludó con un "estás fuerte". A ello hay que sumar que el internacional español también ha puesto de su parte en los números: su salario base será alrededor del millón neto y el resto, hasta los cinco, por objetivos. Eso permite al club cubrirse las espaldas en el caso de que Isco (a quien, no por casualidad, se le ha vinculado su contrato en el tiempo con el que le resta al entrenador vasco) no ofrezca lo que se espera o se dé cuenta de que su Málaga natal está muy cerca. Y si cobrase mucho, es que todo estaría yendo muy, muy bien.