Partidazo de Montiel, que lo cerró marcando el 3-0; y mágico golazo Isco en el 2-0. Ambos sobresalieron junto a Marcao y Dmitrovic, que mantuvo vivo al Sevilla con un par de paradones y su buena estrella
Dmitrovic (8): Dos paradones salvadores y la buena suerte de su parte (el larguero evitó el empate a uno). En la segunda mitad con el pie, todavía con empate a cero y en el ecuador de la primera parte en el que pudo suponer el primer tanto del Copenhague. Dudó en una salida en una contraen la que definió fatal el rival danés. Mejor con los pies que en otras ocasiones. Es un recambio de garantías para suplir a Bono. Le acompañó la fortuna en la acción en la que el balón se va al palo en un remate del Copenhague (pitó falta el árbitro en la acción de su primer despeje).
Montiel (9): El mejor. PARTIDAZO en mayúsculas que cerró con un gol en el que lo hizo todo bien. Se vació y evitó varios ataques peligrosos del Copenhague saliendo de su zona. Le tocó bailar con la más fea, el rapidísimo extremo del Copenhague Mohamed Daramy. Además, apenas contó con la ayuda de Suso para defender. Tiene velocidad, pero le falta madurar al elegir el momento oportuno para atacar. Tuvo algunas internadas interesantes. En una de ellas en la primera parte, conectó contra Rakitic, quien falló en el remate. En otras, arrastró rivales para que Suso eligiera la zona interior que le da opción de disparo.
Gudelj (7): Un lunar negro en un despeje de cabeza al centro (hizo temblar Nervión), pero en general en la buena línea de los últimos partidos. Se ha consolidado y, aunque apenas estuvo exigido, estuvo bien como central y seguro en la salida de balón.
Marcao (8): Contundente. Siempre va con fuerza al choque y suele ganar casi todos los duelos. En la salida de balón, busca pases verticales con los que hacer daño al rival. Sabe romper líneas. Como defecto subsanable, se confía en exceso al cubrir el balón con su cuerpo y, aunque normalmente le han pitado falta, hubo una acción un poco ridícula en la que cedió un saque de banda.
Telles (5): Controles de muchísima calidad. Partido completo. Discreta actuación.
Rakitic (5): El que mejor intrepreta el momento de la presión, pero le faltan piernas para hacerla y el equipo no le acompañó. Aguantó el partido completo y tuvo algunos momentos en los que recordó al mejor Rakitic. ¿Volverá?
Jordán (5): Luces y sombras. No termina de hacer un partido redondo. Algunos buenos desplazamientos de balón en largo, pero demasiados pases cómodos y otro repertorio de pérdidas innecesarias que ante un rival de entidad le podría haber costado el partido al Sevilla.
Suso (3): Pitada al ser sustituido por Lamela en el 55'. La afición del Sevilla es soberana. Está todo dicho. En la primera mitad, varios disparos con intención y sin acierto, y una ocasión en la que le faltó contundencia (tiró a las manos del portero).
Papu Gómez (6): Suyo fue el primer disparo a puerta y suya la asistencia en el gol de En-Nesyri. De menos a más. El pase de gol le eleva la nota.
Isco (9): Al fin le llegó su hora. Destapó el tarrito de la magia con un golazo sólo al alcance de los elegidos. Por momentos, abusó en exceso de la conducción de balón. Decidió mal al mantener el balón en una contra clarísima en los últimos minutos, en vez de dejar solo a Rafa Mir o Lamela. A veces acertó dándole al fútbol del Sevilla la pausa que necesitaba. Arrancó una roja que parece que no no va a acabar en lesión.
Dolberg (3): Medio tiempo. Ni se asoció ni dio nunca sensación de peligro. La que tuvo en fuera de juego, no supo definirla.
En-Nesyri (7): Marcó el gol, que es lo que tiene que hacer. Lástima que se tuviera que retirar lesionado.
Lamela (7): Debe ser indiscutible en este Sevilla porque es de los pocos que tiene físico y velocidad. Demostró su compromiso defendiendo en un par de balones que perdió.
Rafa Mir (5): Volvió a jugar un balón hacia atrás que acabó en pérdida y recordó al regalado en el Bernabéu que supuso el 2-1. Tampoco estaba en ese momento en la zona en la que seguramente querría que estuviera Sampaoli. Apenas tuvo incidencia en el tiempo que estuvo en el terreno de juego.
Acuña (sin calificar): Se le ve más sobrado de peso de lo habitual, aunque tal vez sea una apreciación engañosa. Un cuartito de hora. Tiene que acumular minutos para volver a su nivel.