Dos equipos que vienen de perder la última jornada y aún no saben lo que es ganar en este curso 2024-25 se enfrentan con la mirada puesta en obtener los tan ansiados tres puntos que les den la tranquilidad para poder trabajar.
El calendario no da tregua. La primera jornada intersemanal se ha colado en agosto, con el mercado de fichajes sin cerrar y con los entrenadores aun perfilando lo que quieren de sus equipos. Sevilla FC y Mallorca se verán las caras en este tercer partido de LaLiga 2024-25 con la sensación de que no hay tiempo que perder pero tampoco para aprender.
Los técnicos apenas han podido corregir los errores de sus equipos hasta el momento. Aun así quejarse no es una opción dado que estos puntos pueden marcar diferencias a final de la temporada. Más cuando ambos equipos aún no saben lo que es ganar y vienen de perder su último partido. El caso de los hispalenses fue más doloroso si cabe. Tras hacer un buen encuentro, vieron como en el descuento Ayoze Pérez rompía sus ilusiones de al menos puntuar en el estreno del Ramón Sánchez-Pizjuán.
Esta acumulación de partidos abre la puerta a jugadores que han gozado de menos minutos. Es el caso principalmente de Ejuke. La lesión de Ocampos, sumada a la de Suso, hace que el nigeriano pueda llegar a ser titular por primera vez en partido oficial tras ser una de las sensaciones en pretemporada. Ya entró ante el Villarreal en el tramo final y dejó varios detalles, pero le sigue costando terminar las jugadas. Oportunidad que también podría tener Idumbo. Aún no ha debutado en LaLiga, aunque ya está en dinámica de primer equipo y García Pimienta asegura que necesita minutos para crecer.
Será un duelo de estilos. Mientras que la principal arma del Sevilla FC hasta el momento es su presión alta, el Mallorca intenta hacerse fuerte desde atrás. Por ello, en los duelos estará la clave. Los sevillistas han sufrido en lo que llevamos de curso una sangría defensiva por falta de intensidad. Hasta cuatro goles han encajado en solo dos jornadas. Ante el Villarreal solo ganó el 52% de los duelos defensivos, mientras que su rival de esta próxima jornada tuvo éxito en el 68% de ellos ante Osasuna.
Si a alguien tendrá que tener bien vigilado la defensa de Nervión será a Muriqi. El delantero kosovar se ha convertido en el hombre referencia de los mallorquinistas desde que llegó en enero de 2022. Este curso ya se estrenó con gol ante el Real Madrid y su forma de juego es de la que hace daño a los centrales hispalenses. Una zaga por la que han pasado ya los cinco centrales de la plantilla en estas dos jornadas y ninguno ha terminado de convencer.
Esta forma diferente de afrontar los partidos se entiende desde sus entrenadores. Arrasate y García Pimienta afrontan su primera temporada al frente de sus respectivos clubes y buscan impregnar su idea de fútbol en ellos cuanto antes. Aunque la historia pudo ser distinta para uno de ellos. Es el caso del técnico vasco, cuyo nombre fue relacionado con el Sevilla FC tras salir de Osasuna para sustituir a Quique Sánchez Flores.
El propio Arrasate lo confirmó en una entrevista en el Larguero de la Cadena Ser cuando ya era entrenador del Mallorca: “Como con otros clubs, es verdad que hubo interés del Sevilla, pero preferí la opción del Mallorca. Lo que veía, un club emergente, esos tres años de contrato... No llegamos a hablar ni de contrato, ni de años ni de nada".
Esta será la tercera vez que Pimienta y Arrasate se vean las caras. Las dos ocasiones anteriores se saldaron con empate a uno. Por su parte, el exentrenador de Osasuna le tiene tomada la medida a los sevillistas en estos últimos años. En los seis enfrentamientos más recientes no ha perdido ninguno con un balance de tres victorias y tres empates.
Por contra, el Sevilla FC solo ha perdido un partido contra el Mallorca desde que volviese a Primera División en la temporada 2019-20 tras seis años sin estar en la élite. En ese primer curso en el que los bermellones descenderían para volver a ascender al siguiente año, los de Lopetegui se impusieron por 2-0 y 0-2. A partir de ahí, el saldo es de tres victorias, dos empates y una derrota. Esta se produjo por 1-0 la última vez que los de Nervión pisaron la isla, con Diego Alonso aún en el banquillo.