Óliver Torres ha expresado sus sensaciones tras la victoria ante el Atlético de Madrid (1-0) en los medios de comunicación del Sevilla FC. El jugador extremeño ha recalcado la importancia del partido, ya que “llevábamos tiempo sin ganar aquí y sin darle una alegría a la gente”. Además, se ha dirigido a la afición para agradecerle el apoyo y se ha mostrado feliz por “dedicarles la victoria”. “Ojalá este sea el impulso para que el Sevilla gane todos los partidos”, comentó.
Sobre el resultado, el futbolista sevillista ha reconocido que “cuando te enfrentas al Atlético, sabes que te enfrentas a un equipo grande que siempre tiene ocasiones, pero nosotros también hemos tenido las nuestras. Creo que hemos hecho un gran esfuerzo. Lo importante era ganar y hemos ganado”. De hecho, una de esas ocasiones ha salido de sus botas, pero no ha logrado convertirla en gol: “He ido muy rápido, pensaba que Oblak me iba a salir un poco. Pensé en hacer primero una cosa, luego otra y me he quedado sin fuerzas.”, Entre risas, ha prometido que, a partir de mañana, intentará “hacer más fuerza de cuádriceps por si vuelvo a tener otra ocasión”.
Además, ha garantizado que el equipo “siempre ha trabajado para ganar todos los partidos y las dinámicas a veces son difíciles”, sobre todo cuando “no te encuentras y no salen las cosas, pero aun así el equipo lo sigue intentando”. Además de reconocer la unión que hay en el vestuario, ha afirmado que “a veces se necesitan estos golpes de ilusión para volver a conectarnos”.
Con respecto a su ovación tras ser sustituido, el extremeño ha asegurado que "el esfuerzo en mi persona no es negociable. Siempre intento dar lo máximo y agradezco jugar en el Sánchez-Pizjuán con la afición. Eso es un placer”.