Joaquín Buitrago, presidente del Elche, ha confirmado en una entrevista al Diario Franjiverde, que el Sevilla quiso fichar en el pasado mercado invernal al delantero argentino Lucas Boyé y que si ahora “viene con una oferta interesante, se estudiará”
El dueño del Elche, Christian Bragarnik, mantiene que Lucas Boyé no está en venta y que el Elche no necesita vender, pero el presidente del club, Joaquín Buitrago, lo pone en el cartel de transferibles y muestra su disposición a escuchar ofertas por un delantero al que tienen bien atado con una cláusula de rescisión de 25 millones de euros.
El Sevilla FC acabó firmando en enero a Tecatito Corona y a Martial para reforzar a un equipo que no podía contar con En-Nesyri y que se veía con opciones de pelear por LaLiga. Sin embargo, intentó incorporar antes al delantero argentino del Elche, Lucas Boyé. Al menos, así lo ha confirmado en una reciente entrevista al Diario Franjiverde el presidente del conjunto ilicitano, Joaquín Buitrago.
Ante los rumores que apuntan a que el Sevilla podría estar de nuevo interesado en reforzar su ataque con Boyé, Buitrago ha asegurado que no le extrañaría porque “ya lo querían en el mercado de enero. Cuando se trata de una nueva incorporación, sí que Sergio Mantecón -secretario técnico del Elche- y el míster -Francisco Rodríguez- aportan su opinión, pero cuando se trata de jugadores que ya conocemos, no es necesario. Sabemos cuál es su valor. Si viene una oferta interesante se estudiará”.
Lucas Boyé es joven todavía, 25 años, no está teniendo buenos registros como goleador: 15 goles ha marcado en el Elche en las dos últimas temporadas (8 en la campaña 2020-21 y 7 en la que acaba de finalizar). También ha dado 6 asistencias, 3 en cada una de las dos últimas temporadas.
Con la marcha segura de Luuk de Jong y el adiós de Martial, que ha regresado al Manchester sin opciones de regresar, al Sevilla le quedan dos delanteros: En-Nesyri, que podría salir si llega una oferta importante desde la Premier, donde tiene pretendientes; y Rafa Mir, que ha realizado una muy buena temporada pese a que Lopetegui, a veces, no le ha dado la continuidad que merecía.
El máximo accionista del Elche, Christian Bragnarick, ha manifestado que Lucas Boyé no está en venta. Lo compró por 1,8 millones de euros, ejerciendo la opción que tenía, y ahora remite a su cláusula de rescisión, 25 millones de euros, para el club que quiera llevarse al futbolista más relevante de su entidad.
Sin embargo, el presidente, Joaquín Buitrago, muestra la disposición del club a negociar si llega una buena oferta. Aunque el dueño exhiba solvencia para llegar con fuerza a una hipotética mesa de negociación, el Elche está como casi todos los clubes del fútbol español: deseando vender caro para aliviar las mermadas arcas tras la pandemia y para empezar a comprar barato.