Bono entrena al margen en la previa del choque ante el Copenhague, aunque vuelven Rekik y Acuña

El próximo martes, a las 18:45, el Sevilla FC recibirá al Copenhague en un duelo vital para ambos equipos. Si alguno de los dos consigue alzarse con la victoria, lo tendrá todo de cara para mantenerse vivo en competición continental, aunque sea bajando de Champions a Europa League.

Españoles y noruegos cuentan en su haber con dos puntos: uno del empate entre ambos conjuntos en Copenhague, y el otro correspondiente a la cuarta jornada de la fase de grupos, en la que los sevillistas sacaron un punto de oro ante el Borussia Dortmund, mientras que los leones hicieron lo propio frente al todopoderoso Manchester City.

Ahora, con la moneda en el aire, el Sevilla tendrá que valorar las armas de las que dispone para cosechar la primera victoria de la temporada en casa, que aún se le sigue resistiendo. Para ello, Jorge Sampaoli podrá contar con Karim Rekik y Marcos Acuña, que han vuelto a entrenar con sus compañeros tras superar sus molestias.

De esta forma, el Sevilla libera un poco la enfermería, donde siguen encontrándose Tecatito Corona, Tanguy Nianzou y Fernando Reges. La situación con el brasileño es, cuanto menos, extraña. Regresó a los entrenamientos el domingo previo al choque frente al Valencia para terminar desapareciendo de nuevo. La nota preocupante de la sesión la ha puesto Bono, que ha entrenado al margen de los porteros.

Con las tres bajas seguras por lesión más la de Óliver Torres al no estar inscrito en Champions, el Sevilla buscará sacar sus tres primeros puntos en un Ramón Sánchez-Pizjuán que se ha olvidado de cómo celebrar victorias este curso.