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Sevilla FC
Está claro que la planificación del Sevilla FC para la temporada 22/23 no fue bueno. Empezando por mantener a Julen Lopetegui, cuando había síntomas evidentes de que el proyecto estaba finiquitado, y terminando por la guinda del pastel, un Kasper Dolberg (25) que estaba llamado a golear y que podría marcharse sin ni siquiera haberse estrenado.
Y eso que Jorge Sampaoli dejó entrever, a poco de aterrizar en Nervión, que el ahora mundialista era su ariete preferido, por tener la capacidad -al contrario que Rafa Mir y Youssef En-Nesyri- de relacionarse con balón con el resto del equipo, un aspecto nada baladí si se atiende a que el Sevilla FC, carente de velocidad, potencia y desborde, únicamente puede asomarse al arco contrario mediante asociaciones.
Las primeras actuaciones de Dolberg dejaron muy frío al preparador argentino, quien le fue dando cada vez menos protagonismo, hasta el punto de no sacarle ni siquiera al terreno de juego frente al débil Velarde CF, en la primera ronda de la Copa del Rey. Un mensaje nítido, desde luego, para el ex del Ajax, que en Nervión esperan que regrese al OGC Niza por Navidad. Algo difícil, pero factible, pues Dolberg no llegó a jugar en la Ligue 1 antes de aterrizar en el Sánchez-Pizjuán, por lo que podría firmar y jugar con un tercer equipo en la presente temporada.
Icardi, la alternativa
Curiosamente, sí que está brillando la otra opción que manejó Monchi hasta último momento, la de Mauro Icardi (29). El italo-argentino ha rendido a un gran nivel en el Galatasaray, pese a que llegó ya en septiembre y con un evidente déficit de entrenamientos. En los últimos cinco encuentros, ha firmado cuatro tantos (uno cada 115 minutos). Lo curioso, pese a que en Nervión se le descartó por tener un perfil eminentemente rematador cuando se buscaba un '9' distinto a Mir y En-Nesyri (o sea, más asociativo), es que el delantero cedido por el PSG ha dado, además, tres asistencias. Está claro, pues, que en el fútbol no siempre se puede acertar...