Javi Galán, una de las opciones para suplir a Marcos Acuña

La etapa de Marcos Acuña en el Sevilla FC está cerca de terminar. River Plate ha apostado por repatriar al lateral izquierdo al que le restaba un año de contrato y salvo contratiempo de última hora todo apunta a que regresará a su país natal. Una venta que los de Nervión ven con buenos ojos de cara a rebajar la masa salarial de la plantilla a pesar de la importancia de Acuña en la plantilla. 

El argentino ha sido uno de los jugadores más importantes en los últimos años cuando las lesiones se lo han permitido. Ahora le toca a Víctor Orta buscar un recambio de garantías. De momento ya está Pedrosa pero si se marcha Acuña tendrá que llegar otro jugador para pelear el puesto con el catalán. 

El Sevilla FC maneja varias opciones, como en todas las posiciones, y uno de los que más gusta es Javi Galán. Según ha informado el periodista Rubén Uría, los hispalenses están tras los pasos del futbolista del Atlético de Madrid. Una operación que también está tanteando el Getafe. La única opción que se baraja ahora mismo es una cesión en la que los colchoneros piden que el equipo en el que recale su jugador se haga cargo de la ficha completa. 

El exlateral de SD Huesca y Celta de Vigo llegó el verano pasado a la capital de España tras ser uno de los mejores jugadores del campeonato en su posición. Nunca le entró por el ojo al Cholo Simeone y sólo disputó nueve partidos antes de salir cedido en enero a la Real Sociedad. Con los donostiarras se hizo con el puesto de titular, llegando a jugar 18 partidos. 

Ahora de regreso al Atlético, sigue sin contar para el técnico argentino. Samu Lino y Riquelme están por delante en el carril zurdo y el jugador sabe que tiene que salir si quiere disponer de minutos. En Sevilla se encontrará un equipo en reconstrucción y en el que encajaría como un guante en el estilo de García Pimienta. El único escollo de momento es el sueldo del jugador de más de tres millones de euros brutos y su encaje en el límite salarial de los sevillistas. Un problema que también tiene el Getafe y podrían obligar a los colchoneros a rebajar sus pretensiones.