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Sevilla FC
Esta España es todo lo que se le puede pedir a un equipo. Un juego vistoso, capacidad de reacción al golpe, jóvenes que emocionan y un sinfín más de calificativos. Ya está a sólo un paso de volver a coronarse como campeona de Europa 12 años después. Los de Luis de la Fuente se han impuesto 2-1 a Francia gracias a los goles de Lamine Yamal y Dani Olmo que supieron darle la vuelta al tempranero gol de Kolo Muani.
El combinado español ha vuelto a mostrar su capacidad de superar las adversidades. La victoria ante Alemania fue heroica pero dejó tres bajas por el camino. Pedri cayó lesionado y Le Normand y Carvajal fueron amonestados y no podían jugar las semifinales por sanción. En este contexto le tocó el turno a Jesús Navas. Tras unos días donde había gente dudando de él, el partido no empezó de la mejor manera. El centro del gol llegó de su banda y a los pocos minutos vio una tarjeta amarilla pero si algo ha demostrado el palaciego es ser un competidor nato.
Navas supo rehacerse de este mal arranque y empezó a despejar cualquier balón que pudiera aparecer por el área española. Su partido acabó antes de tiempo debido a unos problemas físicos. El lateral ya sufrió un duro pisotón en el último partido de la fase de grupos y durante toda esta temporada ha tenido problemas en la cadera. Aún así ha dado todo mientras estaba en el campo y la afición lo ha reconocido con una ovación al ser sustituido. Al final del partido se le ha visto visiblemente emocionado, como si de su primera final se tratase.
España espera rival para el domingo entre Inglaterra y Países Bajos y Navas sigue demostrando ser el talismán de esta selección. El palaciego es el último superviviente del Mundial 2010 y la Eurocopa 2012 y siempre que ha estado en un gran torneo España lo ha ganado.