Edición
Sevilla FC
Víctor Orta fue más claro que nunca. El director deportivo compareció en rueda de prensa tras la presentación de Ejuke e hizo saber los jugadores con los que no se cuenta: “Tengo un contacto de dos veces a la semana con sus representantes. Ellos lo tienen claro, el club lo tiene claro. Su ciclo aquí ha terminado, lo sabe desde hace mucho tiempo”.
Es el caso de Joan Jordán. El catalán ha pasado al ostracismo en los últimos tiempos hasta el punto de que la pasada temporada sólo jugó 14 partidos. La teoría es fácil pero la práctica nunca lo es y encontrarle salida no será tarea sencilla, dado que tiene contrato hasta 2027 y una ficha que ningún club está dispuesto a asumir. El Alavés ya sondeó su fichaje pero obviamente no pueden hacerse cargo de su salario.
Hace unos días el jugador ya compartió en sus redes sociales que había acortado sus vacaciones para ponerse a punto lo antes posible. El centrocampista ha estado entrenando en el gimnasio de la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios. Ayer tras las palabras de Orta volvió a dejarse ver por Instagram con una historia en la que se puede leer: “Más fuerte que nunca”.
Una situación que puede tener dos lecturas. Jordán quiere convencer a García Pimienta o quiere estar preparado para cuando le llegue la oportunidad en otro club. La realidad es que la segunda es la que tiene más enteros dado que el deseo del club de que no continúe más allá de su bajo rendimiento se debe en gran medida a su sueldo. El Sevilla FC tiene la urgente necesidad de reducir la masa salarial para adecuarse a la bajada en el límite salarial de LaLiga que se avecina.