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Sevilla FC
Dmitrovic (Suspenso): Inseguridad. No se entiende dónde quedó el portero que tan buen nivel dio en el Eibar y lo más seguro es que en otro sitio vuelva a serlo. Ni Mendilibar pudo devolverle la confianza y la sombra de Bono fue demasiado alargada para él.
Nyland (Notable): Salvador. Sin su presencia en la portería a saber qué habría pasado con el destino del Sevilla FC. Ha aportado seguridad entre los palos y a la defensa con grandes actuaciones que le han valido la renovación.
Jesús Navas (Notable): Eterno. Ni el paso de los años ni los problemas físicos han evitado que sea una pieza importante y aporte tanto en liderazgo como en el juego. Queda una posible Eurocopa y cinco meses de LaLiga para disfrutarlo.
Juanlu (Bien): Aprendiz. Tenía por delante a Navas y ello le ha quitado muchos minutos, pero qué más puede pedir que aprender del mejor antes de ser su relevo.
Badé (Suficiente): El síndrome del segundo año. Su llegada en enero de 2023 trajo la estabilidad defensiva pero en este se ha contagiado del ambiente enrarecido de Nervión. Las lesiones también le han pasado factura y por ello no es conveniente dictar sentencia de un jugador de 24 años.
Sergio Ramos (Notable): Un buen regreso. Tras todo el culebrón de su vuelta el camero se ha ido convirtiendo en el líder de la zaga y pieza clave para la permanencia. Veremos su futuro pero será complicado para Víctor Orta encontrar un central de su fiabilidad con la situación económica del club.
Kike Salas (Notable): Inesperado. Nadie se habría imaginado a principio de temporada que iba a acabar asentado en el primer equipo y siendo fijo en los onces. Aún tiene cosas por mejorar propias de la juventud.
Gudelj (Suficiente): Entrega marcada por las lesiones. Los problemas en el menisco han hecho que su segunda vuelta haya estado prácticamente en blanco y no haya podido disfrutar de los buenos meses del equipo.
Nianzou (Suspenso): No levanta cabeza. Desde que aterrizó en Nervión no se han visto las cualidades que llevaron a Monchi a pagar más de 15 millones por él. Relegado a sexto central y solo ha jugado cuando el resto estaban lesionados.
Marcao (Suspenso): Condenado por las lesiones. La zaga de tres de Quique Flores parecía venirle al dedo pero los problemas físicos le han privado de conseguir la regularidad necesaria para hacerse hueco.
Marcos Acuña (Suficiente): Su peor año en Nervión y aún así su rendimiento no ha sido malo del todo. Cuando está al 100% físicamente sigue siendo uno de los mejores argumentos competitivos del equipo, por desgracia ha pasado poco este año.
Pedrosa (Suficiente): De más a menos. Fue de lo mejor de la primera vuelta del equipo, sabiendo aprovechar la ausencia de Acuña pero desde que llegó Quique Flores ha desaparecido. Apunta a ser importante si el argentino se marcha en verano.
Soumaré (Bien): Un amor de verano. Aunque al principio le costó encajar terminó firmando grandes noches, pero acaba la temporada y la situación económica del club obliga a que cada uno tenga que seguir sus vidas por separado.
Joan Jordán (Suspenso): Se lo tragó la espiral negativa. Azotado por los problemas físicos no ha podido levantar cabeza cuando el resto del equipo lo ha hecho. Otro que seguramente en otro sitio pueda volver a sentirse futbolista.
Agoumé (Suficiente): Mala pata. Una lesión le cortó la progresión cuando apuntaba a ser el único fichaje de invierno en asentarse en el once. Tras volver ha combinado partidos interesantes con otros en los que ha pasado totalmente desapercibido.
Sow (Suficiente): Se esperaba más. Llegó como el refuerzo estrella en verano pero los cambios en el banquillo y las lesiones han hecho que no termine de sentirse cómodo en ningún momento. En su segundo año ya habrá menos argumentos para defenderlo.
Óliver Torres (Bien): Trabajador en la sombra. La concepción que se tenía de él ha provocado que en muchas ocasiones pase desapercibido su importancia para mantener el equilibrio del equipo, especialmente en el esquema de Quique Flores. Sin ser el más vistoso ha ofrecido un rendimiento estable y cuando no ha estado en el tramo final el equipo lo ha notado.
Hannibal (Suspenso): Expediente X. Su talento hacía antojar que le aportaría al equipo la chispa que le faltaba en el centro del campo. Nada más lejos de la realidad, apenas ha contado para Quique y simplemente ha dejado algún detalle técnico.
Lucas Ocampos (Bien): Desbocado para lo bueno y para lo malo. Nadie puede decirle al argentino que se esconde cuando las cosas no van bien. Siempre ha intentado tirar del carro sin importar cual fuera la posición. Aunque esa excitación a veces le ha costado caro.
Erik Lamela (Suspenso): Desaparecido. Ya de por sí siempre ha sido un jugador irregular pero este año las lesiones han impedido que pueda dejar esos grandes partidos como tuvo la temporada pasada.
Suso (Suficiente): A cuentagotas. Nadie puede dudar que tiene la magia pero el problema es que frota la lámpara en contadas ocasiones. Ha tenido partidos donde ha sido el líder y otros donde ha pasado totalmente desapercibido.
Januzaj (Suspenso): Inexplicable. Desde que llegó a Nervión esta sería la palabra que mejor le resume. Cuando ha tenido oportunidades sólo ha mostrado apatía y por si fuera poco tuvo un encontronazo con Víctor Orta tras el mercado de enero.
Lukébakio (Bien): El descarado más tranquilo. Ha habido partidos para echarse las manos a la cabeza por las grandes jugadas que ha hecho y en otros que no se explica la poca intensidad con la que juega. La lesión de rodilla le cortó la progresión cuando empezaba a encontrar su sitio.
Mariano: (Suspenso): Quiere y no puede. No se le puede negar que cuando ha podido jugar lo ha intentado pero la puntería y las lesiones hace mucho tiempo que están en su contra.
Rafa Mir (Suspenso): Tenía que acabar pasando. Nunca ha terminado de adaptarse al Sevilla FC y los dos varapalos de sus fichajes frustrados al Valencia lo han terminado condenando.
Alejo Véliz (No presentado): El gran perjudicado de la dupla de Isaac y En-Nesyri. Sólo ha podido jugar poco más de media hora y ahora le toca buscar otro destino donde poder demostrar su talento. En Nervión no ha dado tiempo para saber si es válido o no para la élite.
Isaac Romero (Notable): Revolucionario. Su llegada al primer equipo en enero fue un huracán que se llevó las malas energías y devolvió la competitividad al equipo. Más allá de las cifras el trabajo que ha hecho con y sin pelota hacía tiempo que no se veía en los hispalenses.
En-Nesyri (Sobresaliente): Estrella. Un año más empezaba con el runrún de si el Sevilla FC debía aspirar a un delantero mejor y otro año más acaba siendo el máximo goleador de la plantilla. Por desgracia para el sevillismo todo apunta a que no volverá a cantar sus goles.