Los canteranos maquillan los problemas defensivos (2-1)

El Sevilla FC afrontaba su segundo partido de pretemporada. Tras caer derrotado ante el Orlando Pirates por 0-2, los hispalenses se medían a un rival de un escalón superior como el Sporting de Portugal, vigente campeón de la Liga portuguesa, en el Estadio Algarve. A pesar de las bajas en la portería y el lateral derecho, García Pimienta sacó un once que bien podría asemejarse al que debutase en LaLiga ante la UD Las Palmas el 16 de agosto. 

Diferencia de ritmo

Los de Nervión demostraron desde el inicio que a pesar de la entidad del oponente no iban a renunciar a una de las señas de identidad del técnico catalán. El Sevilla FC comenzó presionando arriba a la salida de balón de los de Amorín, aunque sin demasiado éxito. Los lusos consiguieron romper esta primera línea con facilidad en varias ocasiones, dejando al equipo sevillista desprotegido y concediendo más de una oportunidad.

No fue hasta el cuarto de hora cuando Rodrigo Ribeiro consiguió abrir la lata. El punta portugués se plantó sólo frente a Alberto Flores tras un gran pase profundo de Nuno Santos y con un leve toque superó al meta canterano para poner el primer gol. Tras el tanto, el Sevilla FC se calmó y empezó a tener posesiones más largas aunque sin demasiado peligro. La diferencia de ritmo con el Sporting de Portugal se hizo notar y es que los portugueses llevan más tiempo de preparación y afrontan la Supercopa de Portugal el 3 de agosto. 

La recta final de la primera parte fue más trabada entre faltas y la lesión del asistente del gol portugués. Aun así los hispalenses consiguieron crear su ocasión más clara. Ejuke vio la subida por banda de Pedrosa para ponerle un pase al espacio. Una vez que pisó el área el lateral catalán sacó un centro raso que Isaac Romero no alcanzó a rematar por los pelos en lo que ya era un gol cantado. 

Los canteranos dieron la cara

No fue el arranque de segunda parte soñado para los de Nervión que vieron como los portugueses agrandaban la distancia en el marcador. Un balón en largo que no despejó bien Kike Salas acabó en los pies de Ribeiro que cedió a Trincao para que batiese a Alberto Flores. Antes, García Pimienta había introducido a Nianzou y Suso por Gudelj y Ocampos nada más volver del descanso.

A diferencia del primer tiempo, el Sevilla FC no terminó de encontrarse tras encajar el gol. Los blanquirrojos apenas se acercaron a la portería de Kovacevic y el ritmo de la presión disminuyó claramente. Una vez cumplida la hora de partido, el técnico catalán tiró de excel para hacer hasta siete cambios y dar descanso a los que estaban sobre el campo y poner piernas frescas.

Los canteranos que entraron demostraron las ganas de convencer al entrenador y desde el primer momento se mostraron participativos. Mientras tanto en defensa el equipo hispalense siguió haciendo aguas y Pedro Gonçalves contó con varias ocasiones para poner el tercero. La más clara en un mano a mano frente a Flores que finalizó con una vaselina que se marchó rozando el palo.  

Idumbo fue el más activo y provocó la tarjeta roja de Diomande tras una arrancada por el centro en el que superó a varios defensas portugueses. La mejora se acabó transformando en un gol para el Sevilla FC. Suso vio a la perfección a Collado y este la puso en la frontal para que Ramón Martínez sacase un gran tiro para reducir distancias. El tanto llegó tarde y los hispalenses apenas tuvieron tiempo de buscar el empate.